- 1 Berenjena no muy grande
- 1 Cebolleta grande
- Aceite
- Sal
- 100 Ml de Agua
- 30 Grs de Pan (1 rebanada de pan de molde)
- 1 Lata de Atún al natural
- 30 Grs de Queso Mozzarella
- Orégano
- Pimienta
- 1 Huevo
- 35 Grs de Pan rallado
- Harina
ELABORACIÓN
- Poner a calentar una sartén al fuego con unas tres o cuatro cucharadas de aceite, añadir la cebolleta picada muy menuda y pochar a fuego vivo hasta que esté transparente y blanda.
- Mientras vamos a pelar la berenjena (yo solo he usado una) y la vamos a cortar en cubos pequeños, la ponemos en un colador con sal durante una media hora para quitar el amargor. Pasada la media hora enjuagar y escurrir.
- Añadir la berenjena a la sartén con la cebolla y cocinar a fuego medio durante unos cinco minutos.
- Después añadir unos cien mililitros de agua y dejar cocinar a fuego medio bajo hasta que se evapore toda el agua, de vez en cuando ir aplastando con una espátula la berenjena.
- Cuando tengamos una pasta cremosa que ya no tiene agua añadir un poco de sal y pimienta reservar y dejar enfriar.
- Una vez fría añadir una lata de atún y 30 g de queso, yo mozzarella, un poco de orégano, un huevo y el pan escurrido bien de su agua, mezclar todo muy bien y añadir 35 grs de pan rallado, mezclar, tapar con film y reservar en el frigorífico una hora.
- Una vez pasada la hora sacar del frigorífico quitar el papel film y formar bolitas del tamaño de una nuez, pasar por harina, quitar el exceso de harina y freír en una sartén con abundante aceite caliente hasta que estén bien doradas. Sacar y dejar sobre papel absorbente de cocina. Servir.
- Listas para comer.
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