- 500 Grs de Azúcar
- 200 Ml de Agua mineral
- 1 Cucharada de Zumo limón
- 1 Cucharadita de café de bicarbonato de sodio
- Termómetro de cocina
ELABORACIÓN
- Poner en un cazo el agua, el azúcar y el zumo de limón.
- Remover para mezclar, con cuidado de que los bordes no queden salpicados con restos de azúcar.
- Llevar a fuego medio-alto y con el termómetro ir midiendo la temperatura.
- Cuando alcance los 100°C retirar del fuego.
- Dejar enfriar hasta que el almíbar alcance los 50°C o 60°C.
- En ese momento añadir el bicarbonato y remover bien, se producirá una reacción como consecuencia de la mezcla del limón y el bicarbonato y se formará una espuma blanca.
- A medida que se va enfriando, las burbujas desaparecerán y sobre la superficie quedará una capa blanquecina.
- La retiramos con una cuchara y cuando está completamente frío lo guardamos en un frasco de cristal hermético bien limpio.
Cómo usar el azúcar invertido:
Masas fermentadas:
- Reemplazaremos el 50% del azúcar común por el invertido.
- Es decir que en una receta que lleva 100 g de azúcar, usaremos 50 g de azúcar común y 50 g de invertido.
Helados:
- Se reemplaza un 30% del azúcar común por el invertido.
- Es decir que en una receta que lleva 100 g de azúcar, usaremos 70 g de azúcar común y 30 g de invertido.
Bizcochos:
- Se reemplaza un 20% del azúcar común por el invertido.
- Es decir que en una receta que lleva 100 g de azúcar, usaremos 80 g de azúcar común y 20 g de invertido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario